Cuarto destino: Changai

Fin de la Parte I del viaje. Aca en Shang Hai me quedo 5 meses. Estudio, trabajo y luego a seguir con la Parte II.

Llegué hace 2 semanas. Costó bastante familiarizarme y adaptarme pero creo que ya entré en chino-mode. Al contrario de Tokyo, en Shang Hai reina el caos. Los semáforos no cumplen ninguna función para los chinos, y las motos y bicicletas por la calle y la vereda y te pasan por encima. Por alguna razón en particular a los chinos les ENCANTA tocar bocina, por más que no haya NADIE delante de ellos ni en la calle, tocan bocina igual y todo el tiempo y gritan bastante. Hay obras y construcciones por todos lados y olores raros de vez en cuando. Sin embargo, a pesar del smog, el ruido, la gente que te empuja... tiene su encanto. Después de todo dicen que el caos es justamente una de las cosas que hace tan atractiva a esta ciudad.

La comida china EN CHINA no se parece en nada a la que venden en restaurantes chinos en el resto del mundo. Acá todo bicho que camina va a parar al asador. Y siempre, es mejor NO preguntar lo que estás comiendo. La mayoría es todo frito... por lo cual siempre es bueno encontrarse un restaurant de comida japonesa o coreana, que abundan, y son un poco más saludables. Ya me hice adicto a los jiaozi, los ravioles chinos esos que vienen en todas las formas y con todos los rellenos.

La vida nocturna en Shang Hai no tiene nada que envidiarle a la de Buenos Aires o a la de Paris, aunque se sale más temprano, hay una gran variedad de barcitos y boliches y todos los que fui hasta ahora bastante originales, muy buena música y buena onda. Desde una fiesta sadomasoquista a un megaboliche con DJ's de Europa.

Shang Hai es una ciudad de contrastes. Tiene los rascacielos más altos que vi en mi vida (que a veces no se llegan a ver bien por el smog) al lado de unos templos milenarios; restaurantes y bares chetísimos donde no se ve un solo oriental y cantinas completamente tradicionales donde no se ve una sola letra en nuestro alfabeto. Hay que ver por qué la llaman el Paris de Oriente... todavía me falta mucho por descubrir...